MARAVILLOSOS PÁJAROS PERIFÉRICOS. Entrevista a LA M.O.D.A. y a PÁJARO JACK

Tienen en común algunas cosas, como habernos traído, sin moverse de casa, los sabores más auténticos de la América profunda: unos, convirtiendo la Sierra de Gata en los inhóspitos paisajes en los que un desesperado Sr. White ponía en práctica sus conocimientos químicos; otros, haciendo pasar la aspereza de la meseta burgalesa por el wild wild west de Johnny Cash o de Alvin Straight (el protagonista de la película The Straight Story, un anciano que viaja desde Iowa a Wisconsin a lomos de su cortador de césped sin más equipaje que una manta, cerveza y latas de salchichas).

Comparten también la juventud, un espíritu humilde e independiente, y el gusto por el sonido en acústico y las letras sugerentes. Ambos acaban de estrenar nuevo disco este otoño (con títulos tan evocadores como “¿Quién nos va a salvar”, en la caso de La M.O.D.A. y “Vuelve el bien” en el de PÁJARO JACK), y ambos nos están demostrando que sí, que se puede hacer buena música sean cuales sean las coordenadas -geográficas, culturales y musicales- desde las que se trabaje.

Conozcamos un poco más a fondo a los burgaleses La Maravillosa Orquesta del Alcohol (“La M.O.D.A.”) y a los granadinos PÁJARO JACK.

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- La Maravillosa Orquesta del Alcohol -
("La M.O.D.A.") 

• Vuestras canciones son un coctel sorprendente… Personajes llenos de cicatrices, inmersos en un ambiente sombrío y decadente (andenes de tren, carreteras secundarias, gasolina y alcohol…) que, sin embargo, nos hablan a través de estribillos potentes y pegadizos, coros cantables y melodías luminosas. ¿Cómo se “cocina” esta mezcla?

No tenemos ninguna fórmula ni receta secreta (risas), pero es verdad que puede ser uno de los rasgos del grupo, el tener una parte instrumental con sonoridades más "luminosas" y amables, mezclada con letras más oscuras. Quizá, sin pretenderlo, en nuestras canciones haya una especie de equilibrio, como el que existe entre las cosas buenas y malas de la vida...

• Como “compatriota” vuestra, sé que las ciudades pequeñas son, para un músico o una banda, una especie de huevo, cómodo en los inicios por la protección y la atención que te brinda (tenemos que decir que La M.O.D.A colgó el cartel de “No hay entradas” en el concierto presentación de su disco que ofreció hace unas semanas en Burgos), pero cuyo cascarón es luego muy difícil de romper para quien quiera salir al exterior. ¿Cómo está siendo este proceso para vosotros? ¿Está siendo buena la acogida en otras ciudades? ¿Qué tal el “asalto” a Madrid?

La comparación nos parece muy acertada, pero en nuestro caso podemos considerarnos afortunados. Fuera de nuestra ciudad siempre nos han tratado con mucho cariño y nos han acogido como si fuera nuestra casa, desde el primer concierto en Coruña hasta el último en Santander, y eso no tiene precio, es el principal motivo que te hace querer volver a la furgoneta y hacerte los kilómetros que haga falta para poder tocar fuera, conocer nuevos sitios y amigos...

(Desde luego, que no le tienen miedo a la furgoneta queda claro a la vista de su anterior videoclip, “Nómadas”): 

En cuanto a Madrid, nuestra relación con la capital es especial. En los dos últimos años hemos actuado allí en 6 o 7 ocasiones, hemos hecho varias visitas para grabar acústicos y entrevistas de radio y tv... se podría decir que es como nuestro segundo hogar. En cada concierto que damos hay más gente que en el anterior y siempre volvemos felices.

• Despedidas desde la cubierta de un barco en 1932, Johnny Cash cantándole a la América profunda, el desarraigo beat de Jack Kerouac, vuestras inseparables camisetas de tirantes blancas… ¿qué hace que, para unos chicos tan jóvenes como vosotros, el pasado (o, en general, lo “retro”), sea una fuente tan grande de inspiración?

El pasado tiene ese punto de nostalgia / melancolía que nos parece muy inspirador. Además, hay veces que es menos aburrido que el presente, te permite imaginar cómo fue algo que pudo o no suceder. Y, musicalmente hablando, muchos de los discos que nos influyen vienen del siglo pasado, con lo que la mirada hacia atrás es inevitable… Pero tampoco nos consideramos parte de ningún "revival" ni vivimos anclados en el ayer.

• Hablemos del presente, entonces (risas)… Hay (o al menos a mi me ha parecido percibirlo) un cierto tono de desencanto en las letras de vuestro último trabajo, que además, como si de una declaración de intenciones se tratara, se titula ¿Quién nos va a salvar? ¿Es negativa vuestra visión del presente? ¿Qué o quién creéis que nos puede salvar?

El tono de las letras está indirectamente influido (negativamente) por la situación actual de nuestra sociedad, por cómo está la gente de nuestro entorno, de nuestra edad... el desempleo, la dificultad económica, etc. Y por otro, siempre nos han gustado más las canciones tristes, que son las que te dejan marca.

En el presente vemos cosas buenas y cosas malas, como la vida misma. No somos especialmente pesimistas, aunque nuestros dirigentes se empeñen en intentar hacernos cambiar de opinión cada día con sus actos. De hecho, pese a la situación que atraviesa el país, somos muchos los que aún tenemos ilusión y ganas de dejarnos la piel por aquello en lo que creemos. Eso último es muy valioso, tener algo a lo que aferrarte incluso en los peores momentos.

• Estoy totalmente de acuerdo con vosotros… Creo que la música (la cultura, en general) es un gran refugio, un bote salvavidas al que aferrarse en los malos momentos. Por eso es tan importante cuidarla y protegerla. ¿De qué maneras creéis que puede ayudarse a quienes, como vosotros, crean y apuestan por la música independiente y de calidad?

La cultura está minusvalorada por la sociedad, empezando por nosotros mismos. Creo que no somos conscientes de la importancia que tiene en nuestra vida. No es sólo entretenimiento ni tiene sólo efectos tangibles, aporta muchas cosas que no se pueden cuantificar y quizá el primer paso sería ser conscientes de ello. En cuanto a los grupos de música a todos se nos ocurren mil formas de ayudar y potenciar su actividad, pero vamos a empezar por conseguir que no se entorpezca, que no se pongan trabas, como el 21% de IVA cultural, que es una infamia.

• Los amantes de la música con reminiscencias folk, del pop en acústico al que no le da miedo utilizar instrumentos no habituales (saxos, mandolinas, violines, banjos) estamos viviendo un momento dulce gracias éxito de grupos como Arcade Fire, Of Monster and Men, los superventas Mumford and Sons y, aquí en España, bandas como Los Corizonas. Que el sonido de la M.O.D.A esté en esa onda constituye (de eso no hay duda) un punto a vuestro favor, pero, ¿os habéis subido a esa ola conscientemente o ha sido algo casual?

Podríamos esforzarnos en citar determinados grupos como influencias o rechazar ciertas comparaciones, pero es algo que no nos quita el sueño. Las canciones y el tiempo nos pondrán en nuestro lugar, al margen de símiles y etiquetas más o menos acertadas. A nosotros solo nos importa hacer mejores canciones y mejores conciertos cada día, independientemente de lo que se escuche o se deje de escuchar a nuestro alrededor, de modas pasajeras... Es una locura pensar que alguien pueda tocar música con el objetivo de ganar dinero y/o popularidad, y no porque le salga de dentro, ¡pero eso se demuestra a lo largo de una trayectoria y no con palabras!

• Me parece intuir de tus palabras que compartís con quien ha sido el productor de vuestro disco, Diego Galaz, esa filosofía de apostar por la autenticidad y la honestidad por encima de todo. ¿Cómo ha sido vuestra experiencia con él en el estudio? ¿Qué os ha aportado a la hora de acometer la producción del disco?

Diego Galaz nos ha aportado una mentalidad musical completa, que no se limita a la composición o a lo puramente musical, sino al oficio de músico, a una forma concreta de hacer las cosas y de trabajar, a buscar la autenticidad como banda, aprender a tocar mejor, a hacer mejores canciones, a dar mejores conciertos, etc. además de aportar su experiencia y su gran nivel como instrumentista. En definitiva, que ha sido un lujo trabajar con él y hemos aprendido un montón de la experiencia.

• Un proyecto inmediato y el proyecto de vuestros sueños.

A corto plazo nuestro objetivo es presentar nuestro primer disco '¿Quién nos va a salvar?' por todos los lugares donde podamos. Hacer que la gente escuche nuestra música y disfrutar tocándola en directo, sin pensar más allá. Tocar mejor, hacer mejores canciones, seguir grabando y seguir tocando.

Un sueño sería hacer una gira por Europa... ojalá algún día se cumpla.

• Y para acabar… sabemos que estáis a unos días de presentar vuestro nuevo álbum en Madrid… ¡contadnos cosas! ¿qué nos vamos a encontrar los que vayamos?

Para nosotros el 22 de noviembre (22.00 horas, Sala “Sol”, Madrid) es una fecha marcada en rojo en el calendario. Tenemos muchísimas ganas de presentar el nuevo disco en la capital, con toda la banda al completo (esa noche seremos 7, teclista incluido) y disfrutar del público madrileño que tan bien nos ha tratado desde el primer día. Tendremos algún invitado sorpresa, ¡y hasta ahí podemos "leer"!

Pues mientras “leemos”, os dejo el último videoclip de La M.O.D.A.: “Los hijos de Johnny Cash”: 

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- PÁJARO JACK -

• La imagen del grupo, las melodías amables y esas letras con pinceladas naïf que os caracterizan, contrastan con la portada de este nuevo disco que estrenáis y con la temática del videoclip “El Frente Polar”, ambas con un toque más oscuro, más underground… Se me ocurren algunas posibles explicaciones:

1. (Cinematográfica): Sois muy fans de “Breaking Bad”.
2. (Hormonal): PÁJARO JACK ha crecido y es ahora un pájaro adolescente que se rebela contra el bien.
3. (Filosófico-trascendental): Pero… ¿qué es el bien? ¡Todo -también lo oscuro- puede ser el bien! 
4. 
   

   (De manual): Creéis en los efectos del popular “una de cal y otra de arena” para no dejar de sorprender. Los contrastes son parte de la esencia del grupo.

          ¿Cuál es la explicación real?

La verdad es que, de todas las posibles explicaciones, la única verdadera del todo es la primera. Somos muy fans de Breaking Bad y algo de su espíritu hay en este último trabajo. Aunque no fue premeditado… durante grabación del videoclip, inmersos en el paisaje espectacular del Cabo de Gata, se nos ocurrieron esos guiños a los que haces referencia y decidimos incorporarlos.

La segunda de las opciones tiene parte de verdad: Pájaro Jack ha crecido. Pero no se rebela contra el bien… El bien son muchas cosas, cosas que te dan energía y que te hacen volver con ella.

En realidad, el argumento del vídeo (que podéis ver debajo) surgió a raíz de la idea que subyace en la letra de la canción: estás en un punto en el que crees que todo va bien, te relajas y, al día siguiente, sin entender muy bien cómo ni por qué, las cosas empiezan a torcerse. Es entonces cuando, como dice la canción, empiezas a ver el cielo de otro color… 

• PÁJARO JACK ha nacido y crecido en Granada. Comentábamos con La MODA que, para los músicos, las ciudades pequeñas son algo así como un huevo. En el interior del huevo los inicios son cómodos -protección, facilidad para tocar, atención mediática local-, pero, cuando se pretende salir, cuesta romper el cascarón. ¿Cómo está siendo este proceso para vosotros? ¿Está siendo buena la acogida en otras ciudades?

La acogida que tengas en un lugar depende de muchas cosas: de la propia ciudad, de la promoción que se haya hecho en ella, o el número de veces que hayas tocado allí… Cuando tocas “en casa” no necesitas apenas promoción, porque el boca a boca fluye y todo acaba llegando a la gente. Sin embargo, cuando sales fuera, si no ha habido mucha insistencia a través de radios, prensa, etcétera, salvo que hayas tocado mucho y te hayas hecho un pequeño nombre, es muy difícil llenar una sala de conciertos. Nosotros tenemos la suerte de que en nuestra ciudad tenemos muy buena acogida y el grupo va poco a poco sonando en ciudades como Madrid, Sevilla, Málaga… Estamos contentos, pero queda mucho por hacer.

• Vuestras canciones tienen letras crípticas, aparentemente despreocupadas, pero con un mensaje que va más allá de lo que podría desprenderse de una primera escucha. ¿Qué importancia tienen las letras para PÁJARO JACK? ¿Son tan solo una puesta en situación, un mecanismo para crear una determinada atmósfera, o la botella va con mensaje dentro?

Las letras son igual de importantes que la música que hacemos, yo diría que a veces más. Hay casos muy claros, como cuando se parte de una letra ya definida, y la música se subordina a ella, o cuando la letra le da totalmente sentido al tema, como sucede en ‘El bien’.

¡Pero es que incluso una letra te puede alterar toda una estructura ya hecha! Por ejemplo, puede ocurrirte que estés componiendo una canción en la que lo que más te motive sea la música, y, sin embargo, una vez va tomando forma la letra, ésta provoca que cambie totalmente el sentido de la canción, e incluso las emociones que te suscita.

• El tema “El Bien”, que inspira el título de vuestro disco, irradia luminosidad y esperanza, una rareza en los tiempos que corren. ¿Creéis, como en la canción, que “todos acabarán entendiendo el bien”, o es sólo una licencia artística? ¿Sois optimistas ante el futuro?

Muchísimo. La canción trata de describir justo eso, esperanza y optimismo ante los tiempos que corren. No creo que todos acaben entendiendo El bien o lo que significa (hay gente que es muy difícil que lo haga), pero por lo general sí, muchos llevan tiempo haciéndolo y otros muchos lo harán dentro de poco.

También este “Las Luces”, de su primer álbum, es una muestra de ese enfoque optimista: 

• Parece que PÁJARO JACK, pese a ser un ave, desciende a las raíces en busca de inspiración. Así, en vuestra música encontramos esas sonoridades folk que siempre os acompañan, el sabor de las Alpujarras -donde grabasteis vuestro primer videoclip-, ecos de leyendas tribales, como en “Anikuni”, o la pureza de los instrumentos en acústico y los juegos de voces de los sesenta. ¿Dónde o en quién encontráis la inspiración?

Normalmente en la música que escuchamos en el día a día. Antes la encontrábamos sobre todo en el folk de los 60 y 70, pero vamos evolucionando y ahora escuchamos también otras muchas cosas. Todos tenemos gustos diferentes y cada uno bebe de unas fuentes distintas, así que al final se crea una especie de sinergia donde nos inspiramos los unos a los otros.

• La música -la cultura en general- ha sido siempre un refugio, un reconstituyente, un lugar en el que encontrarse a uno mismo, como el árbol gris del que habla vuestra canción. Pero parece que últimamente también la música se está poniendo un poco grisácea por falta de apoyos, y por la dificultad de convertirla en una profesión. ¿Alguno os dedicáis profesionalmente a la música? ¿De qué maneras creéis que puede ayudarse a quienes, como vosotros, crean y apuestan por la música independiente y de calidad?

Pues está difícil. Por mucho que digan, la mayor ayuda es la gente, es el público el que mantiene a un grupo. Si la gente escucha tu música y le gusta, va a tus conciertos, y si esa gente cada vez es más, cada vez podrás tocar en más sitios y ganarte la vida con esto.

Por otro lado, la situación de crisis actual hace que la gente pueda contar con menos dinero para gastar -musicalmente hablando-, y muchas veces ese dinero se invierte en macro-festivales donde tocan un gran número de bandas, eventos que muchas veces están muy mal organizados, masificados y con un sonido pésimo. Esto sí es culpa de determinadas empresas, instituciones y, en general, de quienes se mueven en el mundo de la música al ritmo que marca el dinero. La forma en la que se nos ocurre que se podría ayudar es apostando en vez de por los macro-festivales, por conciertos más exclusivos de las bandas que te gustan.

• Según me habéis contado, alguno de los miembros de PÁJARO JACK tiene conocimientos profesionales de sonido ¿Qué os aporta ese bagaje técnico? ¿Creéis que saber qué teclas tocar para que algo suene de una determinada manera hace menos espontánea la labor de composición o, por el contrario, os da un enfoque más preciso para “construir” las canciones?

En realidad, los conocimientos técnicos no tienen mucho que ver a la hora de construir una canción, pero a la hora de grabar es verdad que tardas menos en darte cuenta del sonido que buscas para determinada parte de la canción o instrumento, qué tipo de efecto usar, etcétera. Lo que más ayuda es que en esta profesión escuchas mucha música, sobre todo de otros grupos, y si grabas su música en el estudio, aprendes muchísimo de ellos: cómo arreglan sus canciones, qué sonidos usan…

• Un proyecto posible y el proyecto de vuestros sueños.

Hay muchos, y muchas posibilidades… Ahora mismo me quedo con el deseo de que podamos movernos mucho con nuestra música y sacar lo suficiente para poder vivir fundamentalmente de ella, aunque tengamos que seguir compaginando nuestro trabajo como músicos con otras cosas que también nos motiven y nos den algo de dinero.

Y en un plano más general, nuestro deseo sería poder ver que cambian y mejoran las cosas en el mundo de la cultura, especialmente en el ámbito de los circuitos de música en directo.

• Tengo entendido que PÁJARO JACK volará hasta Madrid en el mes de diciembre. ¿Cuándo y dónde es la cita? ¿Qué podremos encontraremos los que vayamos?

Estaremos el día 21 de diciembre con Lori Meyers en la sala ‘La Riviera’ dándolo todo, ya que nos verán unas 3.000 almas. Esperamos dar lo mejor de nosotros y pasarlo y hacerlo pasar muy bien.

¡Muchas gracias y muchos éxitos a ambos!